Evidentemente el mejor truco es planear con tiempo que no implica necesariamente reservar. Hacer previsión de lo que hay que reservar vuelos, hoteles, coches, etc.
Al mismo tiempo, comprobar los costes y los medios que tenemos para hacer frente. Nos conviene una tarifa de hotel pagada por adelantado que se más barata o pagar en el hotel según el medio de pago que nos interese utilizar, por ejemplo.
Otro tema tener claras las fechas de ida y vuelta, ver si fechas alternativas nos suponen reducciones de costes que nos puedan resultar interesantes.
A la hora de reservar, puede salir a cuenta hacer todo en una misma reserva. Aunque no lo parezca todavía hay ocasiones en que un paquete de agencia puede salir rentable. Así que al pasear, no hay que perder de vista los escaparates de las agencias de viajes. Eso si que sean actuales por alguna agencia es capaz de dejar las ofertas de esquí del invierno pasado puestas en pleno mes de julio.
Y sino se puede reservar todo separado, incluso los vuelos a no ser que las condiciones de la oferta se apliquen a vuelos de ida y vuelta. Y si no se termina de tener clara la fecha de ida o de vuelta y la tarifa es interesante? Pues se asegura el precio comprando ese vuelo en cuestión primero. Mirando también que forma de pago, tarjeta o incluso divisa sale más más a cuenta.
Y cuando se tiene más o menos claro, muy útil hacerse un “plan de reserva” y organizar cuando reservar cada cosa, suena un poco a cuento de la lechera pero así nos aseguramos que nuestro bolsillo no sufra en exceso, por eso lo de la planificación con tiempo. Primero el vuelo de ida, al otro mes el de vuelta, el hotel lo pago en situ o lo reservo al otro mes que habré conseguido juntar el dinero, etc.
Y con todo planificado si hay que ajustar fechas por que el presupuesto no llega, pues se hace y no es tan complicado. Porque aunque no lo parezca organizar un viaje puede llegar a ser muy estresante hasta que no se da con la fórmula de acometer la reserva. A veces cuando hay varios hoteles se puede una noche menos en uno y otra más en el otro para compensar costes.
La experiencia ayuda mucho para planificar y reservar más rápido. Conocer las páginas web y sus condiciones, no te hace perder tiempo, vas direct@ a lo que necesitas. No siempre el precio es el único condicionante para reservar, las formas de pago de las que se pueda disponer pueden ser más condicionantes. Ya que cada vez son más las agencias y aerolíneas que aceptan tarjetas de débito o incluso paypal para pagar, así que facilidades que no sea.
Evidentemente vivimos en un momento complicado, sobretodo económicamente y más que nunca hay que controlar los gastos, ver cuales son necesarios, cuales no, intentar siempre reducirlos en la medida de lo posible. Así será más fácil hacer el viaje o comprarnos lo que nos apetezca.
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